Desarrollo de soluciones tecnológicas enfocadas en la sostenibilidad ambiental, clave para garantizar el futuro de las próximas generaciones

El desarrollo tecnológico debe ir de la mano de la sostenibilidad, pues solo de esta forma, empresas y países podrán reducir su huella de carbono y su emisión de gases de efecto invernadero.

Así lo consideraron expertos que coincidieron en la mesa redonda virtual ‘El camino hacia la sostenibilidad de la tecnología’, organizada por Ikusi, empresa especializada en telecomunicaciones y ciberseguridad, en el marco del Día Internacional del Cambio Climático.  En la mesa estuvieron presentes Enrique Carvajal, Director de Ingeniería de Ikusi en México; Alberto López, CIO de Solaria Energía y Medio Ambiente; Roberto Moral, Director de Arquitecturas y Sostenibilidad de Cisco España; Diego Huertas, Experto en WiFi en Ikusi Colombia. El evento fue moderado por Lucía Bonilla, Directora de Redes and Telecom.

Durante el evento virtual, los expertos señalaron que el sector tecnológico está dando pasos muy importantes y firmes en torno al desarrollo de soluciones que generen un impacto positivo en el cuidado del medio ambiente. Indicaron además que a mayor transformación digital, mayor sostenibilidad, por lo que la digitalización es uno de los temas que más se están impulsando desde el sector.

Enrique Carvajal, Director de Ingeniería de Ikusi México, señaló que como empresa integradora, Ikusi tiene una tarea fundamental en torno a la sostenibilidad, “que es la de buscar alianzas con fabricantes tecnológicos que busquen una reducción en la huella de carbono, además de concientizar a nuestros clientes de la necesidad de aportar cada uno desde su campo de acción en favor del cuidado del medio ambiente y la reducción de la huella de carbono”.

El directivo de Ikusi indicó que el procesamiento y almacenamiento de información, que genera una huella de carbono importante, es un ejemplo de un factor en el que hay que estar muy pendientes. “Un ejemplo es el uso del e-mail. Cada correo electrónico que enviamos genera un 0.3 kg de Co2, derivado en gran medida del flujo de información a la nube, procesado todo en un Data Center. Y aquí un dato muy revelador. Los Data Centers en el mundo consumen alrededor del 1% de la energía global a nivel mundial y se prevé que para el 2030, llegue hasta al 7%. Por tanto, mientras más sostenibles sean los equipos que integran un Data Center, menos huella de carbono dejarán”.

Enrique Carvajal comentó que desde Ikusi han colaborado en diferentes proyectos en los cuales se ha buscado que obtengan la certificación LEED, que es una de las certificaciones ambientales más importantes a nivel mundial.

Por su parte, Roberto Moral, Director de Arquitecturas y Sostenibilidad de Cisco España, indicó que las empresas de telecomunicaciones y los fabricantes de desarrollo tecnológico tienen un papel muy importante en esta tarea de sostenibilidad. “Como fabricantes debemos diseñar productos más eficientes, incorporando la economía circular en todo el proceso de fabricación, desde las fases de diseño y hasta su venta y colocación”. Alberto López, CIO de Solaria Energía, indicó que lejos de ser un gasto, es una inversión que las empresas hagan uso de soluciones y equipos que generen eficiencia energética y que impulsen la sostenibilidad.

Además de ello, los expertos coincidieron que el desarrollo de soluciones en torno a impulsar la virtualización de entornos, el trabajo híbrido, la Inteligencia Artificial, uso de aplicaciones SAAS (Software as a Service), son algunas otras alternativas que contribuyen a generar un desarrollo sostenible en todo el mundo.

Cabe destacar que organizaciones y empresas de todo el mundo están sumando esfuerzos para hacer realidad los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) definidos por la ONU. En este sentido, Ikusi está trabajando para impulsar la sostenibilidad de las empresas y las organizaciones a través de la digitalización. Un ejemplo de esa vocación es el desarrollo de herramientas de eficiencia energética para racionalizar el uso de energía en las oficinas, reduciendo el consumo de energía de la infraestructura tecnológica mediante el apagado y encendido controlado de los equipos, aprovechando la flexibilidad y escalabilidad asociada a la implementación de las redes definidas por software.

Es tan solo un ejemplo de cómo la actividad económica y la protección del medio ambiente pueden ir de la mano impulsando el ahorro energético por la disminución de energía consumida, aportando en el cuidado del medio ambiente debido a la disminución de emisiones CO2, al tiempo que se ahorran costos, ya que la energía facturada será menor.