La desarrolladora Awaceb y la publisher Kepler Interactive se complacen hoy en presentarles una mística y sincera carta de amor a Nueva Caledonia con Tchia. La encantadora aventura con saltos de alma ya está disponible en PlayStation 5, PlayStation 4 y PC a través de Epic Games Store.
Tchia es un sandbox bañado en sol que invita a los jugadores a escalar, deslizarse, nadar y navegar en un hermoso mundo abierto inspirado en Nueva Caledonia, tierra natal de los cofundadores de Awaceb. Cuando los jugadores inician esta gran aventura, Tchia, la heroína del juego, se encuentra en circunstancias precarias. Su padre es secuestrado por Meavora, el tirano gobernante del archipiélago, y su hogar es invadido por los Maano, hordas de temibles enemigos que siguen al gobierno.
Con poderes de salto de alma a su disposición, Tchia puede tomar el control de casi cualquier objeto o animal que se encuentre y que le dé ventaja para combatir y explorar. Desde volar como un pájaro para alcanzar los picos de las montañas y sumergirse en las profundidades del océano como un delfín, hasta prender fuego a los secuaces de Meavora como una linterna, los jugadores convertirán el entorno en la herramienta definitiva.
Aparte de sus habilidades sobrenaturales, Tchia tiene una mochila llena de otros tesoros útiles, como su honda y su ukelele. Dispara a los Maano desde lejos o simplemente tira un coco de un árbol para tenerlo a la mano con el arma preferida de Tchia. Si necesitas un impulso místico adicional, toca el totalmente jugable ukelele de Tchia e invoca animales, influye en los cambios del clima y más con solo unos pocos acordes. Si no hay necesidad de acción o cambio, siempre puedes tocar cualquier melodía que te venga a la mente.
Con un hogar que liberar de las garras de un gobernante malvado, los jugadores tendrán mucho que hacer en el archipiélago de Tchia. Explora playas, océanos, cimas de montañas y más, y descubre baratijas y otros objetos coleccionables que se pueden cambiar por cosméticos elegantes (y a veces graciosos). Otros secretos mágicos yacen escondidos en las cuevas de la isla, esperando a ser descubiertos por aventureros de vista aguda.
